08/09: Jornada 1

VALMA – Buenos Aires FS vs. Café & Copas Eleven

O: “Pero niño, ¿qué haces ahí? ¡A estudiar y hacer algo de provecho!”

Podríamos destacar muchas cosas de este encuentro, como que el equipo carbura, o que jugamos por primera vez en nuestro pabellón Narciso Alonso. Pero del primer partido de la temporada tenemos que destacar primera decepción arbitral. Y es que cada partido que pasa es más difícil de comprender que los señores -en este caso los niños, o más bien niñatos- que visten de gris lleguen a cobrar 35 € por partido ¿arbitrado?. Pero bueno, trataremos de hablar de fútbol sala, que es a lo que intentamos jugar. Al menos, siempre y cuando nos dejan.

El partido empezó muy bien para los intereses del equipo azulón, que presentó un cinco inicial formado por Alber, Pedro, Ricky, Fran y Toño. A los pocos minutos de juego ya nos habíamos puesto con un 2-1 a favor en el luminoso, gracias a los goles de Pedro y Jose. Así se llegó al final de los primeros 20 minutos, en los que demostramos que éramos superiores y que siguiendo así podríamos llevarnos tranquilamente el partido.

Dicho sea en descargo del personaje de gris, durante la primera parte no hubo mucha polémica arbitral, aunque ya empezaron las primeras protestas por parte de Toño al sacar el portero de ellos mas allá del medio campo a lo que el arbitro contestó de forma vacilante y ahí nos empezamos a temer lo peor que llegaría en la segunda parte. ¿No os suena eso de falta, saque rápido y gol en contra? Porque a nosotros sí.

Comenzó la segunda parte con los mismos cinco con que iniciaron la primera y demostramos esa superioridad en el juego a base de goles llegando a ponernos a falta de 10 minutos para el final con un 5-2 en el marcador del Fortín, gracias a goles de Ricky, Toño y Fran, que hacia pensar que el partido estaba prácticamente resuelto.

El otro equipo, al que aún no hemos hecho referencia, era el Café&Copas Eleven, que probablemente debido a la impotencia de verse detrás en el marcador se dedicó a protestar al árbitro. Esta circunstancia se dio viendo que era un chavalín –seremos amables- al que se le podría comer el tarro muy fácilmente, y decidieron jugar con ese factor para soñar con una remontada que a punto estuvo de materializarse.

A falta de que no les salían las cosas como querían, buscaron el juego de contacto, o en este caso de demasiado contacto, ya que hicieron entradas demasiado agresivas ante la pasividad del arbitro que se limitaba a decir que “no le ha tocado”, algo increíble viendo las entradas que hubo reconocidas por el propio portero del otro equipo, quien afirmó de sí mismo ¡que debería haber estado expulsado! Como lo leen. Un rival que reconoce que lo ha hecho mal y un ¿árbitro? sin la más remota idea de qué es o para qué sirve un silbato.

El partido entonces entró en una fase en la que no se jugaba a nada y se perdía el tiempo en discusiones que no servían para nada para los intereses del VALMA y sí para los de los rivales, que consiguieron empatar el partido a falta de 1 minuto para el final. Al final un quiero y no puedo por parte de los chicos de azul, que al final incluso acabaron con miedo de tener mucho el balón por la dureza del otro equipo.

Pero bueno, hay que mirar el lado positivo de las cosas y es que era el primer partido del año, en el que demostramos que sabemos jugar y bastante bien al fútbol sala. Pese a que esto haya sabido a derrota tenemos que verlo como un puntito que nos servirá para nuestras aspiraciones de llegar a los playoffs.

Respecto al árbitro también tenemos que aprender de ello y resolver el partido cuando podamos y no llegar a pasarlo mal y no caer en un juego que a nosotros no nos beneficia para nada. Aunque es probable que ASOFUSA también tenga que aprender que los críos de 16 años están mejor estudiando que pitando partidos de fútbol sala. Sobre todo si no tienen idea.

Así que animo chicos que esto yo creo que promete.

¡AUPA VALMA!

(crónica elaborada por Ricky)